“¡Somos agua, somos vida, somos esperanza!” es la proclama que sonó con fuerza en la Cumbre Amazónica del Agua en Iquitos, los días 1 al 3 de octubre. Con convicción profunda cada persona participante se ha adherido al mensaje que, con sencillez, habla de una verdad que reconocemos por la vía de la experiencia personal y colectiva como habitantes de este territorio panamazónico y miembros de un Pueblo peregrino que hace historia.
A la Cumbre Amazónica del Agua, nos hemos dado cita, gracias a la organización y gestión de la Vicaría del Agua del Vicariato Apostólico de Iquitos, representantes de organizaciones sociales, de pueblos indígenas u originarios, equipos pastorales, obispos, e instituciones de sociedad civil, de diferentes países de la región Amazónica y Latinoamerica.
Somos testigos de cómo esta Cumbre logra, en clave sinodal, amplificar la voz y el grito de los pueblos que observamos con indignación la crisis hídrica que está afectando el derecho humano de acceder a agua suficiente, de calidad en los diferentes territorios de la Panamazonía. A su vez, nos inspira como signo de esperanza que plantea acciones para visibilizar y trabajar sobre todas estas demandas amazónicas en diferentes ámbitos y niveles.
Para el Programa Universitario Amazónico participar en esta Cumbre, ha sido una oportunidad que nos permite confirmar que la educación es una alternativa indispensable para impulsar transformaciones sociales y culturales. Transformaciones que solo pueden venir de las y los actores territoriales críticos que decidan tomar en sus manos la construcción de realidades más dignas. El PUAM estará ahí para acercar herramientas críticas, promover la incidencia, fortalecer articulaciones, crear puentes que lleven a potenciar las capacidades de las personas, comunidades y pueblos de los diferentes territorios de la Panamazonía.
Para saber más
La Cumbre Amazónica del Agua, organizada por el Vicariato Apostólico de Iquitos del 1 al 3 de octubre, surge como una respuesta urgente ante la crisis hídrica que afecta a las comunidades más vulnerables de la Amazonía occidental. En un contexto de cambio climático, sequías extremas y creciente amenaza a los ecosistemas acuáticos, esta cumbre eclesial busca visibilizar el impacto ambiental en la región, reflexionar sobre el rol de la Iglesia y de los pueblos indígenas frente a esta problemática, y fomentar redes de colaboración para la defensa del derecho al agua y al saneamiento. Inspirada en los llamados del Papa Francisco en Laudato Si’, Laudate Deum y Querida Amazonia, la iniciativa convoca a actores de toda la cuenca amazónica para construir una cultura del agua centrada en la justicia socioambiental y la resiliencia comunitaria.
Conozca más sobre la Cumbre en vicariatodeiquitos.org.